Propósito
Establecer medidas preventivas y de actuación para garantizar la seguridad y el bienestar de los menores que participen en las actividades de Grupo Nordestada, protegiéndoles frente a cualquier forma de violencia física, psicológica, sexual, negligencia, acoso o trato vejatorio.
Ámbito de Aplicación
Este protocolo es de aplicación a:
- Todo el personal (monitores, entrenadores, recepcionistas, dirección).
- Colaboradores externos y voluntarios.
- Familias y personas responsables de menores.
- Menores que asisten a actividades deportivas, recreativas o formativas.
El centro se ocupará del conocimiento del presente documento por parte de los empleados del centro y de los propios menores y sus representantes legales (padres, tutores…)
Principios Rectores
- Interés superior del menor: Todas las decisiones y actuaciones adoptadas por el Grupo Nordestada estarán orientadas a garantizar y priorizar el bienestar físico, emocional y psicológico de los menores.
- Protección integral y prevención: Se fomentará un entorno seguro, inclusivo y respetuoso en el que se prevengan activamente todas las formas de violencia, tanto físicas como psicológicas, sexuales o institucionales.
- Detección precoz y actuación inmediata: Se impulsará la capacitación del personal para identificar de forma temprana posibles indicadores de riesgo y se garantizará una respuesta ágil, confidencial y eficaz ante cualquier sospecha o hecho violento.
- Participación del menor: Los menores tendrán derecho a ser escuchados, informados y partícipes en las decisiones que les afecten, de forma adaptada a su edad y grado de madurez.
- Tolerancia cero frente a la violencia: Cualquier manifestación de violencia será rechazada de forma categórica, aplicando medidas proporcionales y ejemplares que aseguren la protección efectiva del menor.
Medidas de Prevención
Certificación del personal: Todo el personal que tenga contacto habitual con menores deberá presentar el certificado negativo del Registro Central de Delincuentes Sexuales.
Formación específica: Los trabajadores recibirán formación básica en:
- Detección de signos de maltrato o abuso.
- Buen trato y relaciones respetuosas con menores.
- Actuación en caso de sospecha o incidente.
Diseño de actividades seguras: Las actividades con menores deberán:
- Estar supervisadas por personal capacitado.
- Evitar situaciones de aislamiento adulto-menor.
- Garantizar espacios seguros, visibles y accesibles.
Control de acceso y salidas: Las entradas y salidas de menores serán supervisadas. Se registrará a la persona autorizada para recogerlos.
Código de conducta del personal: Todo el personal se comprometerá por escrito a respetar un Código de Conducta basado en el respeto, la no discriminación y la protección del menor.
Detección y Comunicación de Situaciones de Riesgo
Observación activa: Todo el personal tiene el deber de estar atento a signos físicos o conductuales que puedan indicar una situación de violencia o riesgo.
Canal de comunicación: Cualquier sospecha, incidente o conducta inadecuada podrá comunicarse a través del canal de denuncias confidencial habilitado por Grupo Nordestada:
Es un canal confidencial, seguro y accesible y permite denunciar de forma anónima.
Colaboración con autoridades: En caso de indicios fundados de violencia o abuso, se informará de inmediato a los servicios sociales o fuerzas de seguridad, conforme al deber legal de denuncia.
Responsable de Protección del Menor
Grupo Nordestada designará a una persona como Responsable de Protección, encargada de:
- Aplicar y revisar el presente protocolo.
- Actuar como canal de comunicación interno.
- Coordinar la formación del personal.
- Servir de referencia para menores y familias.
Podrán contactara con el Responsable de Protección a través del canal designado:
Actuación ante Situaciones de Violencia
Cuando se detecte o comunique una situación de violencia, el procedimiento será el siguiente:
Detección o recepción de información: El personal que detecte o reciba indicios, sospechas o evidencias de una situación de violencia contra un menor deberá:
- Registrar de forma inmediata la información conocida.
- Notificar al Responsable de Protección del Menor o al canal de denuncias.
Evaluación inicial: El Responsable de Protección:
- Analizará la situación con la mayor diligencia y confidencialidad.
- Determinará si existen indicios fundados.
- Consultará con dirección y, si es necesario, con servicios especializados.
Medidas urgentes de protección: Si la situación implica un riesgo inmediato para el menor:
- Se adoptarán medidas provisionales de protección (separación del presunto agresor, acompañamiento del menor, información a la familia, etc.).
- Se contactará con los servicios sociales o autoridades competentes.
Comunicación formal a autoridades: Cuando haya indicios razonables, se deberá:
- Comunicar la situación al Ministerio Fiscal, Policía o Servicios Sociales.
- Facilitar la documentación y colaboración necesaria.
Seguimiento y acompañamiento:
El Responsable de Protección hará seguimiento del caso y de las medidas adoptadas.
Se velará por el bienestar emocional y la seguridad del menor afectado.
Se realizará una valoración final para evitar la reiteración y mejorar el protocolo si
fuera necesario.
Revisión y Difusión
El protocolo será revisado al menos una vez al año o cuando se produzcan cambios normativos o incidentes que lo justifiquen.
El protocolo será conocido por:
- Todo el personal y colaboradores.
- Madres, padres y tutores legales.
- Los propios menores, en función de su edad.
Estará disponible en la recepción del centro y en la web.